domingo, 20 de julio de 2008

Los Recuerdos del Bien y el Mal




Frase del dia: Podrias borrar a alguien de tu mente, pero sacarlo de tu corazón es otra cosa!
Del poster arriba,

En la película que les voy a comentar hoy, los recuerdos tienen un papel vital. De hecho, podemos decir que la trama se desarrolla en la mente de una persona, mientras vemos pasar sus recuerdos.

Pero déjeme, usted lector, comenzar el relato de hoy por el inicio. Siempre quiero adelantarme a la mejor parte.

Nuestra historia de hoy inicia con el encuentro de una chica con un chico. Joel (Jim Carrey, el detective de mascotas convertido en actor serio) conoce a Clementine (Kate Winslet, la chica de Titanic) y ambos se enamoran. Luego de una serie de desventuras, rompen su relación de más de dos años. Ahora bien, suena como una historia más de amor desventurado, solo que en este caso Clementine decide borrar a Joel, contratando a un científico de Lacuna, Inc. para que lo saque de su mente, definitivamente.

Nuestro protagonista no entiende porque la chica de sus sueños ni siquiera lo recuerda, investiga que sucedió y decide hacer lo mismo, para luego arrepentirse de querer borrar a Clem en medio del proceso. Podemos ver a Joel luchando en su mente por mantener los recuerdos buenos y malos que tuvo con su amada Clementine, mientras los empleados de Lacuna efectúan el proceso, mientras se comen su comida, bromean en su casa y usan sus recuerdos de Clem para ver como robarle a la chica.

A pesar de ser un recuerdo doloroso, es una parte vital de su vida, y Joel lucha por mantener esa pieza de si mismo, aunque duela muchas veces. Debo confesar que de existir un proceso así podría estar tentado a borrar muchos episodios de mi existencia... De no ser por estar consciente de que estos recuerdos forman parte de mi personalidad y de mi experiencia, aunque muchas veces dolorosa. Como sucede en la película, al estar suprimidos estos recuerdos, quizás estamos condenados a desear repetirlos.

En una nota aparte, respeto mucho al señor Jim Carrey. Quizás me haya hecho reír con sus papeles cómicos, (vamos, sea sincero, hablar con su trasero!) pero el proceso de tornarse serio ha sido un paso muy difícil de aceptar por la audiencia, yo en lo personal ya lo he superado!

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